La presidenta de la Comisión Nacional de Energía Atómica, Adriana Serquis, advirtió que por el freno establecido a la construcción de reactores nucleares impedirá «la posibilidad de exportación de materiales con alto conocimiento» integrado y generará una nueva fuga de cerebros.
La decisión del Gobierno de Javier Milei que afectó a la construcción de los reactores CAREM-25 y RA-10 hace que se pierdan «posibilidad concretas de exportación», señaló la funcionaria nacional.
En diálogo con Todo en Off, el programa que conduce Ramón Indart en Splendid-AM 990, la doctora en Física indicó que esas iniciativas habían generado «expectativa de poder ser recontra competitivos a nivel internacional, con muy buenos proyectos de negocios en cuanto a lo que son las posibilidad de exportación de materiales con alto conocimiento».
«Cada proyecto de esto lleva muchísimos años por lo que su detención representa mucho costo», lamentó.
Asimismo, la investigadora principal del CONICET también alertó que «muchos de los profesionales ven, ante los malos salarios de la CNEA, que afuera pueden conseguir diez veces más» y se van.
«Estamos preocupados. Todo el personal es calificado y elegido para cumplir funciones muy particulares. Empieza a haber mucho temor. Yo no estoy dispuesta a firmar ningún despido», subrayó Serquis.
Y añadió: «No hay un plan nuclear entendido y por eso no sabemos adónde vamos. Hay interés de que continúen las cosas, pero no hay cosas claras. Hay un desconocimiento de qué es lo que se quiere hacer».
Para la titular de la CNEA, la industria nuclear «siempre fue una política de Estado y se esperaba que lo siga siendo», aunque manifestó: «No nos dan una respuesta. Ni siquiera nos pidieron un presupuesto. Nosotros lo mandamos igual». (fuente: Noticias Argentinas)